SÍNTOMAS Y GRADOS DE ERC
A lo largo de la evolución de su ERC, el paciente puede presentar una serie de signos y síntomas derivados de la pérdida funcional progresiva: hipertensión arterial, hinchazón de piernas e impacto sobre los diversos órganos y sistemas del exceso en sangre de urea y otras toxinas que el riñón no puede eliminar: hipertrofia del corazón, arritmias, anemia, alteraciones neurológicas, gastrointestinales y endocrinas, acidosis y alteraciones del metabolismo del calcio-fósforo, enfermedad ósea, etc. Estas manifestaciones dependen de la velocidad de instauración de la ERC y de su estadio evolutivo. Normalmente no se producen síntomas durante el período de disminución de la reserva funcional renal, que es el estadio inicial de la ERC. En esta fase se pierden nefronas funcionantes, como “soldados en una batalla”, y las que quedan aumentan su función de modo compensador, manteniéndose de este modo el equilibrio de fluidos y electrolitos; el paciente suele permanecer asintomático. Los diversos grados de ERC se detallan en la siguiente tabla.
GRADO |
DESCRIPCIÓN |
FILTRADO GLOMERULAR (ML/MIN/1,73 M2) |
---|---|---|
G1 |
Lesión renal con filtrado glomerular normal o hiperfiltración |
de 90 o más |
G2 |
Lesión renal con disminución leve del filtrado glomerular |
60-89 |
G3 |
Insuficiencia renal leve-moderada |
45-59 |
G3b |
Insuficiencia renal moderada |
30-44 |
G4 |
Insuficiencia renal avanzada |
15-29 |
G5 |
Insuficiencia renal muy avanzada |
inferior a 15 |
G5D |
El paciente ya está en diálisis |
- |
Con mucha frecuencia, la ERC se acompaña de un aumento en la excreción urinaria de albúmina, que siempre es patológico y se asocia tanto a progresión de la ERC como a aumento del riesgo cardiovascular. Se define como grado A1 la ausencia de albuminuria o su presencia en una concentración inferior a 30 mg por cada gramo urinario de creatinina. Cuando la concentración es entre 30 y 300 mg/gramo, hablamos de grado A2, o albuminuria elevada, y cuando es superior a 300 mg/gramo, se trata de albuminuria de grado A3, muy elevada, y siempre asociada a un importante riesgo cardiovascular y de progresión de la ERC.
BIBLIOGRAFÍA RECOMENDADA
- Hernando Avendaño L. Nefrología Clínica. 4ª Ed. Madrid: Ed.Panamericana; 2013.
- Lorenzo V. Enfermedad Renal Crónica. [Monografía en Internet] En: Lorenzo V, López Gómez JM (Eds) Nefrología al Día. Disponible en: http://www.revistanefrologia.com/es-monografias-nefrologia-dia-articulo-enfermedad-renal-cronica-136
- Martinez-Castelao A, Górriz JL, Bover J, Segura-de la Morena J, Cebollada J, Escalada J, et al. Documento de consenso para la detección y manejo de la enfermedad renal crónica. Nefrología. 2014;34:243–62.
- Gorostidi M, Santamaría R, Alcázar R, Fernández-Fresnedo G, Galcerán JM, Goicochea M, et al. Documento de la Sociedad Española de Nefrología sobre las guías KDIGO para la evaluación y el tratamiento de la enfermedad renal crónica. Nefrología. 2014;34:302–16.
- Llisterri JL, Gorriz JL. Importancia de la detección temprana de la enfermedad renal crónica en grupos de riesgo. Med Clin (Barc). 2010;134:257–9.
- Portilla ME, Tornero F, Gil P. La fragilidad en el anciano con enfermedad renal crónica. Nefrología. 2016;36(6):609–615